Plato típico de Perú.
Todas las regiones tienen su plato típico y su gran y
riquísima gastronomía que vienen de generación en generación. Por ello no nos
queríamos evitar las ganas de conocerlos y que tu también los conozcas lo que
ofrece cada país de nuestro continente, esperemos llene tus expectativas y te
animes a elaborar estos deliciosos platos, así que sin más preámbulos
continuaremos con la hermosa patria Peruana y cuál es su plato más típico.
Ají de gallina.
Peruano que no ha degustado el delicioso ají de gallina no es
peruano señores así de fácil y sencillo. En Perú uno de los platos más típico
es sin duda este, el ají de gallina, una receta que ha sido tan típica y excepcional dentro de la gastronomía peruana el no probarla es simplemente un
pecado imperdonable (está bien quizás exagero un poquito) pero señores, si a
todos los que piensan viajar al país inca no se les ocurra irse sin antes
probar este delicioso plato típico, no se arrepentirán y es que por la
contextura, sabor e ingredientes vale la pena darse ese gusto.
El aji de gallina es la mezcla de sabores mixtos y tiene como
antecesor al manjar blanco. Asi que por ello se podría decir que tiene origen
de la madre patria (España), y también un poco de la cocina francesa y árabe.
Si nos damos a la tarea de investigar un poco, nos daremos cuenta que la comida
española, árabe y francesa han tenido mucha influencia en la comida típica
peruana.
En sus orígenes tenía un sabor dulce pero con el tiempo su
sazón cambio pero quedo la textura
cremosa y suave que deviene del manjar blanco, es increíble lo sé.
1 pechuga de
pollo o gallina grande.
2 o 3 pepas
de ajo.
½ de ají
picado amarillo y también molido.
1 taza de
leche evaporada (sin nata).
4 papas
amarillas hervidas.
4 aceitunas.
2 huevos
duros.
Pan o
galleta.
Queso
parmesano.
Preparación.
En una olla poner a sancochar la pechuga de la gallina, una
vez hecho esto a continuación deberá desmenuzar la presa.
Limpiar los ajís y luego soasarlos pero cortados en tiras,
después soasados lícuenlos, para esto nos podemos ayudar con el caldo que nos
dejó la pechuga al momento de ser sancochada. Picar la cebolla en cuadritos y dorarlas
junto a los ajos y después le agregas ajís amarillo pero licuados.
Sobre esto echar el pan o la galleta y revuelva con una
cuchara de palo. Una vez que nuestra receta adquiera consistencia agregarle las
pecanas, le podríamos poner un poco del caldo de la pechuga, esto para que el
aji de gallina no quede espeso, echar la gallina desmenuzada y añada el queso
parmesano y revolver ocasionalmente con la cuchara de palo, luego como arte
decorativo puede servir con rodajas de huevo duro y una rodaja de papa amarilla
junto con arroz blanco y salpicar el queso parmesano y listo, a cenar señores.


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